lunes, 13 de febrero de 2012

¿Qué es esto? ¡Metrónomo!

Tomás nos enseñó un metrónomo y nos preguntó qué era. Nos pidió que en casa buscásemos información sobre qué es un metrónomo y que diseñásemos tres o cuatro actividades para introducirlo en el aula de infantil. Y este es mi trabajo:

¿Qué es el metrónomo? 

Es un aparato utilizado para marcar el tempo o el compás de las composiciones musicales. Produce regularmente una señal, visual o acústica, que permite a un músico mantener un tempo constante. 

Para definir el ritmo al cual debe ser ejecutada una pieza musical, se establece el tiempo de duración de una nota negra. Si quien escribe la composición desea que el movimiento o tiempo sea de una nota negra por segundo, escribirá en la parte superior de la partitura de la obra la indicación " = 60", indicando así el número de negras que deben sonar en un minuto. Esto servirá para ajustar el dispositivo a este valor. 

La mayoría de los estudiantes de música, en la actualidad, usa un metrónomo para la práctica, con el fin de respetar un tiempo estándar. Antiguamente, para establecer los tiempos en una composición se usaban palabras en italiano que indican el tempo como "allegro", "vivace", andante" o "presto", pero esta práctica se ha abandonado en favor de valores más precisos para el ritmo de la ejecución. 

La siguiente tabla establece los diferentes ajustes aproximados del metrónomo según las indicaciones del tempo en idioma italiano.

Expresión Italiana
Negras por minuto
Grave
40-43
Largo
44-47
Larghetto
48-51
Adagio
52-54
Andante
55-65
Andantino
66-69
Moderato
70-95
Allegretto
96-112
Allegro
113-120
Vivace
121-140
Presto
141-171
Prestissimo
176-208


El metrónomo mecánico consta de una caja de madera o de plástico y de una varilla metálica que porta una pesa que puede desplazarse a lo largo de la misma. La varilla se comporta como un péndulo invertido de frecuencia ajustable. Cuando la pesa se sitúa cerca de la base, los tiempos son más cortos, mientras que al alejarla de la base el péndulo se mueve más despacio. En la parte superior de la caja, detrás de la varilla, hay una escala numérica que permite fijar el número de oscilaciones por minuto. La escala abarca desde 40 a 208 oscilaciones o pulsos por minuto.


**Información extraída de wikipedia

Actividades para introducir el metrónomo en el aula de infantil 

Introducción y presentación de la herramienta: “Os voy a presentar a un señor muy, muy, muy, importante para todos los músicos. ¿Sabéis quién es? Es el señor metrónomo. ¡Mirad! (muestra del metrónomo). ¿A que es muy bonito? Pues este señor metrónomo es capaz de hacer una cosa… ¡que ni os imagináis!” El metrónomo tendrá colocado en el centro el dibujo de una cabeza para poderlo marcar claramente y poder hacer las actividades siguientes; esto nos permitirá hacer como si la varilla del metrónomo fuese un cuerpo, pudiendo identificar sus movimientos con los nuestros. Antes de comenzar a realizar las siguientes actividades, veremos de qué se compone el metrónomo y cómo se llama cada parte, pudiendo hacer comentarios y analogías sobre las mismas: caja, varilla, piececita, escala de números. 


Somos metrónomos: Una vez presentada la herramienta, les mostraré lo que el metrónomo es capaz de hacer (mover su varilla de un lado a otro con diferentes velocidades). Primero les enseñaré el tempo lento, y tendremos que movernos como si nuestro cuerpo fuese un péndulo de un lado a otro, siguiendo el tempo. Después, realizaremos la actividad con diferentes velocidades. 

El ritmo del metrónomo. Para adentrarnos un poco en el uso del metrónomo, imitaremos su sonido. Volveré a dar cuerda al metrónomo y observaré que cuando la varilla llega al centro o se “pone recta” (sirve de guía el dibujo de la cabeza) suena un “tic”. De este modo, comenzaremos con el tempo de 40 bpm y ascenderemos progresivamente hasta llegar a 100 bpm. 

A medida que observan la velocidad de los movimientos y el sonido de cada tempo, se realizará la actividad, incluyendo a “Somos metrónomos” palmadas en nuestros movimientos. Tendremos que señalar que nuestro cuerpo es como la varilla del metrónomo, por tanto, cuando nos balanceemos de un lado a otro seremos la varilla moviéndonos; cada vez que nuestro tronco esté recto, daremos una palmada. 

Cuando la coordinación movimiento-palmada sea dominada, podremos pronunciar un monosílabo con cada palmada (sol), diferenciando cada tiempo, lo cual nos servirá para la actividad siguiente. Así sucesivamente imitando el sonido del metrónomo. 

¡Cuántas palmadas! Primero les explicaré que antes de que la varilla llegue al centro (antes de que el cuerpo se ponga recto y demos la palmada) podremos dar tantas palmadas como queramos. Para no perdernos con los sonidos, asignaremos una palabra de tantas sílabas como figuras tenga cada tiempo, de modo que la primera sílaba se corresponda a la palmada del centro y las sucesivas a las que entran entre pulso y pulso. 

Comenzaremos con dos corcheas en cada tiempo, a diferentes velocidades: lu-na, correspondiéndose cada sílaba a una corchea. Después, introduciremos tres corcheas en cada tiempo, también a diferentes velocidades (pá-ja-ro) y cuatro corcheas (cho-co-la-te). 

¡Qué divertido es el metrónomo! Una vez que ya hemos trabajado las negras y las corcheas en cada tiempo, realizaremos actividades de ritmos con el metrónomo siguiendo el modelo que les marque. Para hacer los sonidos utilizaremos palmadas, palmas sobre las piernas, patadas en el suelo y pitos con los dedos. 

2 comentarios:

  1. Cita la fuente, wikpedia.

    ResponderEliminar
  2. ¡Gracias! La cité en la columna de la derecha (webgrafía) pero se me pasó por completo ponerla en la entrada.

    ¡Muchas gracias! Un saludo

    ResponderEliminar

Puedes dejarme aquí un comentario =)